Ballesteros fue un pintor español conocido por su estilo único y su contribución al arte contemporáneo. Aunque no es tan ampliamente reconocido como otros artistas de su época, su trabajo destaca por su uso del color y la textura, creando piezas que evocan emociones profundas y reflexiones introspectivas. Su obra a menudo explora temas como la identidad, la memoria y la relación entre el ser humano y su entorno. Moles Ballesteros vivía en Vilasar y se dedicaba a pintar paisajes al óleo, es probable que su obra estuviera influenciada por el entorno natural de esa zona. Vilasar, ubicada en la comarca del Maresme en Cataluña, es conocida por su belleza paisajística, con vistas al mar Mediterráneo y a las montañas cercanas. Esto podría haber inspirado a Ballesteros a capturar la luz, los colores y la atmósfera única de la región en sus pinturas.

Los paisajes al óleo suelen destacar por su riqueza cromática y la capacidad de transmitir emociones a través de la técnica y la composición. Si Moles Ballesteros se especializaba en este género, es posible que sus obras reflejaran una conexión profunda con la naturaleza y un estilo personal que combinaba realismo con elementos más expresivos.  Xavier Moles Ballesteros fue, efectivamente, uno de los pintores fundadores de la Asociación de la Feria de los Pintores del Pi, un evento cultural y artístico que tiene lugar en Barcelona. Esta feria es conocida por reunir a artistas locales y promover el arte en un espacio público, permitiendo a los pintores exhibir y vender sus obras directamente al público.

Moles Ballesteros, con su dedicación al arte y su participación en iniciativas como esta, demostró un compromiso con la difusión de la cultura y el apoyo a la comunidad artística. Su estilo, especialmente en paisajes al óleo, seguramente aportó una visión única a la feria, enriqueciendo la diversidad de estilos y técnicas presentes en este evento.